La implementación de la Inteligencia Artificial no ha pasado desapercibida como una herramienta para la atención en salud mental. Teniendo en cuenta que los trastornos no distinguen de género, condición social, nacionalidad o edad, la IA es un recurso valioso que brinda ayuda de manera equitativa.
Para entrar en contexto, la mayoría de los gobiernos alrededor del mundo en promedio sólo destinan el 2 % de sus presupuestos sanitarios para la atención de la salud mental. Esto pese a que las estadísticas globales señalan que casi mil millones de personas viven con un trastorno mental.
Otro dato inquietante es que una de cada cien muertes en adolescentes ocurren por suicidio. Esta es una de las principales causas de defunción en jóvenes entre los 14 y 17 años. Dicho esto, la Inteligencia Artificial podría dar el primer paso para enfocar sus esfuerzos en apoyar las campañas de bienestar de la salud mental en regiones como Latinoamérica.
La salud mental en América Latina
Cifras de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) indican, por ejemplo, que la prevalencia de síntomas depresivos en Perú fue cinco veces mayor en 2020 que en 2018. En Argentina, un 33 % de las personas durante la pandemia reportó presuntos síntomas de depresión, mientras que el 23 % indicó que padeció ansiedad. También, se demostró que hubo una disminución de la sociabilidad en los niños, provocando un bajo estado de ánimo en la población infantil. Esto se refleja ataques de pánico, angustia y frustración.
Respecto a Colombia, de acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), entre el año 2010 y 2019 fallecieron 23.632 personas a causa de lesiones autoinfligidas. De estos datos el 75 % fueron hombres, es decir, por cada mujer que terminó con su vida, 3 hombres lo hicieron. Entre las causas de estas conductas, están las asociadas al maltrato, las agresiones por género, el fallecimiento de seres queridos, los conflictos de pareja, las enfermedades físicas o mentales y dificultades socioeconómicas.
En Brasil, una encuesta nacional publicada en septiembre de 2020 halló entre la población altas tasas de depresión (61 %), ansiedad (61 %) y estrés (50 %). En cuanto a México, un estudio hecho durante el confinamiento informó que hubo un 28 % de personas con sintomatología de estrés postraumático.
La incidencia de los padecimientos mentales varía según el sexo y la edad. Por ejemplo, la ansiedad es más frecuente en edades tempranas. En cuanto a la depresión, rara vez se da antes de los diez años, pero se presenta dos veces más en mujeres que en hombres.
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La Inteligencia Artificial para el diagnóstico en salud mental
Una forma de usar la tecnología en favor de la salud mental es la implementación de la Inteligencia Artificial desde chatbots o asistentes digitales. Estos pueden operar las veinticuatro horas del día y funcionan gracias a la comprensión del lenguaje natural, las interfaces conversacionales y el aprendizaje profundo.
Existen metodologías que facilitan el acompañamiento a las personascon posibles trastornos o ya diagnosticadas. En diferentes estudios e investigaciones se han implementado agentes psicológicos con Inteligencia Artificial, los cuales pueden ser:
- Agentes de diagnóstico que se emplean para aplicar sus características conversacionales en la detección temprana y triage psicológico de variados padecimientos de salud mental.
- Agentes de evaluación que se programan como una herramienta capaz de hacer una evaluación psicológica exhaustiva del perfil de los pacientes.
- Agentes de intervención que permiten llevar a los pacientes tratamientos psicológicos específicos, por medio de sus cualidades conversacionales.
Los pacientes ahora pueden obtener su diagnóstico de nivel de ansiedad y depresión de manera inmediata y frecuente. Con ello, tener una idea del cómo se encuentra emocionalmente y al concertar una cita médica, tener más confianza o interés para conversar sobre el resultado obtenido.
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La atención en salud mental
Un diagnóstico digital ayuda a incrementar la eficiencia del médico porque el resultado de la evaluación será registrado en el historial del usuario. Gracias a un asistente virtual impulsado por Inteligencia Artificial, la información recogida estará disponible para el doctor en la cita médica programada.
Los logros con estas soluciones se dirigen hacia varios objetivos, no solo ser un canal de contacto sino a la analítica de la data. La interacción en un canal de uso frecuente y con respuestas precisas va a convertirse en medio de consulta. A partir de las conversaciones, la data se transforma en oportunidades de mejora para el conocimiento del asistente virtual. Esto permite tener estadísticas reales sobre los cambios del estado de salud de los pacientes.
De esta manera, el especialista tiene un punto de partida y no invertirá tiempo de la cita en la evaluación. Igualmente podrá dirigir la conversación y esfuerzo a los puntos críticos que crea conveniente según las respuestas brindadas por el paciente en consulta. Con Keos podrás aprender más sobre la construcción de asistentes virtuales, de los beneficios que tiene la Inteligencia Artificial para la salud mental y el sector de la salud en general.